Se presentó esta semana una aplicación para identificar los árboles silvestres del Archipiélago Canario, tal como se lee en la pantalla de los móviles en los que se instala y en su página web (http://www.arbolappcanarias.es/). Una gran idea para la divulgación de nuestra flora por lo que felicitamos desde aquí al Cabildo de Gran Canaria, al Jardín Botánico Viera y Clavijo, al CSIC, y a la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) por su financiación. Es una aplicación independiente, pero relacionada con otra anterior que se realizó para identificar los árboles de la Península Ibérica y Baleares (ver la noticia en http://www.eldiario.es/agricola/medio_ambiente/Nace-Arbolapp-Canarias-gratuita-identificar_0_622938767.html.)
Pero un análisis rápido de las especies que se incluyen en esta aplicación nos aporta datos poco esperanzadores para nuestro medio. No vamos a entrar en la discusión de si el concepto de "árbol" está bastante asentado como para utilizarlo en una guía, ya que en algunos casos es bastante discutido. De hecho cuando vamos al campo podemos ver, por ejemplo, brezos (Erica arborea y E. platycodon) en su mayor parte arbustivos y muy pocos o ninguno arboreo. Pero sí es importante para la temática que importa a este blog la proporción de especies introducidas y autóctonas que aparecen en la aplicación.
De las 84 especies incluidas en la aplicación sólo 34 son autóctonas, y las 50 restantes se reparten entre perfectamente introducidas y asilvestradas (11), introducidas invasoras (16), 20 introducidas pero de manera puntual y en algunos casos dudosa, y 3 especies cultivadas no asilvestradas que intuimos se han añadido por su popularidad en jardines de las Islas (Cedrus atlantica, Araucaria heterophylla y Magnolia grandifolia). Y todo esto sin tener en cuenta dos cosas:
1. Hay árboles que se incluyen como grupos genéricos, como "acacia" y "eucalipto", y que en su interior agrupan varias especies, todas introducidos y muchas invasoras.
2. En la aplicación peninsular y balear, están presentes algunas especies que no aparecen en la canaria: Nicotiana glauca, que puede no considerarse un árbol, y Pinus pinea, que aunque no esté citada en el Listado de Especies Terrestres Silvestres de Canarias, se encuentra asilvestrada en varias islas del Achipiélago.
Para poner un ajemplo de la importancia del peso de las especies introducidas e invasoras en nuestra flora, sólo decir que de las 122 especies de árboles que incluye ARBOLAPP en la Península Ibérica y Baleares sólo 23 no son autóctonas.
Queda patente la importancia cuantitativa y cualitativa de las especies introducidas en Canarias, y como cuestión relacionada, queda también clara la necesidad de aclarar el caso de muchas especies que se incluyen en el Listado anteriormente citado pero que seguramente no estén realmente asilvestradas. Su presencia en el campo deriva de su cultivo en jardines que posteriormente se abandonan. Hay mucho trabajo por delante.
Leucaena leucocephala, uno de los árboles introducidos e invasores que muestra la aplicación