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jueves, 29 de noviembre de 2018

El aromero, Acacia farnesiana. Un claro ejemplo de la influencia del calentamiento global sobre la capacidad invasora de una especie.

    La relación entre cambio climático y especies invasoras ya ha sido tocada muchas veces en este blog (ver http://invasionesbiologicas.blogspot.com/search/label/cambio%20clim%C3%A1tico), pero muchas veces se queda en la elaboración de modelos predictivos (como podemos ver en los siguientes enlaces: https://www.ecologistasenaccion.org/?p=35318; https://www.miteco.gob.es/es/cambio-climatico/publicaciones/publicaciones/CC%20y%20Exoticas%20invasoras_tcm30-70264.pdf).
    Pocas veces podemos ver una relación tan directa como la que nos encontramos en el aromero, Acacia farnesiana, una especie originaria de Mesoamérica y el Caribe, muy extendida en Canarias, sobre todo en Gran Canaria, Fuerteventura y La Gomera. Al menos en Gran Canaria, esta planta está aumentando rápidamente su distribución, pasando de ser una especie abundante sólo localmente, a estar presente en gran parte de la zona baja de la isla, y a aumentar el número de jemplares en algunos puntos de forma alarmante. Conocemos su relación con el conejo europeo, que se alimenta de sus legumbres y facilita su dispersión (https://www.researchgate.net/profile/Marcos_Salas_Pascual/publication/250144237) y ahora además nos llegan desde México, su lugar de origen, la noticia de que un aumento de temperatura favorece la germinación de sus semillas.
    El estudio titulado "Germinación de dos especies del género Acacia a temperaturas elevadas simulando cambio climático", ha sido publicado por Cortés-Cabrera y colaboradores en la Revista Mexicana de Ciencias Forestales (http://cienciasforestales.inifap.gob.mx/editorial/index.php/forestales/article/view/248/895), llega a la conclusión de que las semillas de Acacia farnesiana tienen mayores porcentajes de germinación y velocidades de germinación cuando la temperatura aumenta de 2 a 7 ºC. El porcentaje de germinación aumentó hasta el 100% cuando la temperatura se elevaba 7 ºC.
    Una razón más para luchar contra el cambio climático.
 Aspecto de Acacia farnesiana


 Parte de la enorme población de Acacia farnesiana en el Bco. de Arguineguín, en el sur de Gran Canaria

 Artículo mencionado en la entrada sobre la germinación de Acacia fanesiana a elevadas temperaturas.


miércoles, 21 de noviembre de 2018

Leptoglossus gonagra, una chinche introducida en Canarias y un relicto de la relación Canarias-América. La historia explica en parte la flora y fauna introducida en Canarias

    Seguimos con los insectos y sus plantas hospedadoras. En este caso dejamos las mariposas (Lepidópteros) y nos acercamos a las chicnches (Hemípteros). Leptoglossus gonagra es una de las chinches de mayor tamaño que podemos encontrar en las Islas. Pertenece al grupo conocido popularmente como chinches de patas como hojas (Leaf-footed bug). En Canarias está presente en La Palma, Tenerife y Gran Canaria, y se considera por el Banco de Datos de Biodiversidad de Canarias como Introducido probable, aunque esta clasificación es simplemente por precaución, ya que en numerosos textos y bases de datos internacionales se indica que su distribución natural es Mesoamérica, y que está distribuida actualmente por todo el Planeta en las zonas tropical y subtropical. En Europa continental está ausente, mientras que Canarias es la única zona extratropical no americana donde está presente la especie. Tampoco es muy común en África (cf. en http://naturalista.biodiversidad.co/taxa/154552-Leptoglossus-gonagra; https://www.cabi.org/isc/datasheet/30340; https://www.invasive.org/browse/subthumb.cfm?sub=20789). De todas formas no está de más incluir un punto de duda en esta calificación.
     Y si ha sido introducida en Canarias ¿por qué y cómo? Aquí entran en liza sus especies hospedadoras. Al parecer se trata de una especie fitófaga que se ha encontrado aimentándose de un buen número de plantas, tanto amricanas como cultivos cosmopolitas: Anacardiaceae, Asteraceae, Bixaceae, Capparidaceae, Cucurbitaceae (incluyendo Cucurbita sp. y Cucumis sp.), Euphorbiaceae, Malvaceae, Myrtaceae, Passifloraceae (incluyendo varias especies de Passiflora cultivadas), Poaceae (sobre todo Zea mays), Punicaceae (incluyendo Punica sp.), Rutaceae (sobre todo Citrus sp.), Solanaceae (Nicotiana sp. y Solanum sp.), Typhaceae and Vitaceae (sobre todo Vitis sp.). Como otras especies del género se considera una plaga (cf en https://www.google.com/url?sa=t&rct=j&q=&eP).
Su presencia en Canarias puede deberse a la gran cantidad de plantas americanas que durante cientos de años, han llegado a Canarias y se han cultivado y muchas veces asilvestrado. Muchas de sus plantas nutricias viven en las Islas y no en la Europa Continental. La existencia de esta especie en Canarias,si finalmente se decide que sin lgar a dudas es introducida, sería un relicto de la estrecha relación comercial y humana entre las Islas y América.
     Quizá una prueba de esto sea la situación que propició nuestro contacto con el insecto. Sobre una planta asilvestrada de chayotera, Sechium edule, una cucurbitácea mesoamericana muy cultivada hace años y hoy en franco declive en los huertos de nuestras islas, aparecieron varios ejemplares de este insecto. La planta sólo se indica asilvestrada en Gran Canaria, y realmente lo está en bordes de viejos cultivos e incluso en zarzales que limitan campos de papas o construcciones en las medianías de la Isla. Las imágenes que acompañan a esta entrada se tomaron en Teror, en una finca vecina del Pico Osorio. Los insectos viven en las zonas umbrías bajo las hojas, y de ahí que sean más habituales en plantas trepadoras de hojas anchas.
     La presencia de animales y plantas intriducidos nos aportan información no sólo ecológica, sino cultural y etnográfica. No está de más conocer estas relaciones y entender la riqueza cultural que representan.

 Leptoglossus gonagra

 Chayotera, Sechium edule. Su característico fruto no tiene confusión


Lugar del encuentro. La chayotera trepa hasta la azotea y entra en casa. Siempre será bienvenida, pero no los tripulantes qe lleva.

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Más sobre mariposas introducidas. Leptotes pirithous.

    Sirva esta entrada como una ampliación de la publicada hace pocos días, el 1 de octubre pasado, dedicada a la mariposa de los geranios (Cacyreus marshalli) y la mariposa laberinto (Azanus ubaldus). En dicha entrada comentábamos la existencia en Canarias de estas mariposas que comparten el hecho de ser depredadoras de plantas invasoras en las Islas y que no están catalogadas como introducidas en el Banco de Datos de Biodiversidad de Canarias (cf. en http://invasionesbiologicas.blogspot.com/2018/10/la-mariposa-de-los-geranios-cacyreus.html).
    Añadimos a estas anteriores otra mariposa que se presenta en las mismas circunstancias, Leptotes pirithous.
   Esta mariposa de la misma familia que las anteriores, se citó por primera vez en Canarias en 1994, en Ferteventura. Poco a poco se ha ido encontrando en Lanzaote, La Gomera, Tenerife, Gran Canaria y finalmente en La Palma. Se trata de una mariposa mucho menos exigente con respecto a su planta nutricia, ya que se ha visto sobre diferentes especies de varias familias: Fabaceae, Mimosaceae, Caesalpiniaceae, Plumbaginaceae, Rosaceae, Verbenaceae, Bignoniaceae, Lythraceae,
Caprifoliaceae y Oleaceae, por su capacidad de dispersión por comunidades naturales es mucho mayor que la de las mariposas anteriores (cf. en https://www.researchgate.net/publication/236869425_On_the_recent_invasion_of_the_Canary_Islands_by_two_butterfly_species). De hecho los autores de su primera cita grancanaria indican que:
"Therefore it is to be expected that L. pirithous will eventually also colonize more natural habitats, e.g. in the laurel and pine forests of the Canary Islands. The species might then become a competitor of the closely related endemic Cyclyrius webbianus (Brullé, 1839) which occurs on Gran Canaria, Tenerife, La Gomera and La Palma, and feeds on different genera of Fabaceae."
(Por lo tanto, es de esperar que L. pirithous eventualmente también colonice hábitats más naturales, por ej. los bosques de laurel y pino de Canarias. La especie podría entonces convertirse en un competidor de la endémica Cyclyrius webbianus (Brullé, 1839) que se encuentra en Gran Canaria, Tenerife, La Gomera y La Palma, y se alimenta de diferentes géneros de Fabaceae.).
    De hecho, el artículo donde realizan esta primera cita grancanaria y en la que hablan también de las dos mariposas anteriormente mencionadas lo titulan, un tanto exageradamente, de esta manera: 
Sobre la reciente invasión de dos mariposas en las Islas Canarias con el primer registro de Leptotes pirithous (Linnaeus, 1767) de Gran Canaria, España (Lepidoptera: Lycaenidae)

    Queda de nuevo patente que hay que revisar el caracter introducido o invasor de muchas especies que se señalan como nativas en el Banco de Datos de la Biodiversidad de Canarias.

 Leptothes pirithous. Imagen obtenida de https://es.wikipedia.org/wiki/Leptotes_pirithous

Delonix regia, el flamboyán, una de las muchas plantas nutricias de esta especie.



sábado, 3 de noviembre de 2018

La azucena Amaryllis belladonna, una bonita planta invasora muy poco conocida.

   A vueltas con la belleza de algunas plantas invasoras. En este caso nos centramos en una planta cuya fenología la hace bastante desconocida, a pesar de ser muy empleada en jardinería de zonas templadas y húmedas. Se trata de la azucena rosada, Amaryllis belladonna (=Brunsvigia rosea). Esta bonita planta florece en Canarias en otoño, con las primeras lluvias. Si no llueve en esta época del año es posible incluso que no florezca. Primero aparecen las flores, en grupos de tres en el extremo de unos largos tallos morados, oscuros y peludos. Duran pocas semanas, y después emergen las hojas, largas, estrechas y verdes, que casi se extienden sobre el suelo sin levantarse. Estas hojas permanecen hasta el verano, cuando desaparecen. El bulbo del que salen tanto flores como hojas queda enterrado e invisible durante el verano a la espera de las lluvias. Todo esto hace que, si no la vemos en flor, sólo veamos unas hojas similares a las de muchas otras monocotiledóneas, que no nos permiten determinar la especie. Esta razón hace que sea bastante desconocida. De hecho es una de las pocas plantas que no tienen ficha propia en la base de datos de especies introducidas en Canarias (http://www.interreg-bionatura.com/especies/index.php?opt=verDatos#), a pesar de ser catalogada como Introducida Invasora (II). En la base de datos de la biodiversidad de Canarias (http://www.biodiversidadcanarias.es/atlantis/admin/adminEspeciesCitadasDocumento.jsf) constan citas de esta planta En Tenerife, La Gomera y Gran Canaria, pero en la lista de documentos relacionados con esta especie no hay ninguna referencia a alguna localidad concreta de Gran Canaria. Los documentos señalados como poseedires de información cartográfica son generales, que hacen referencia a una isla entera. En el mapa de distribución de esta misma base de datos, se señalan los municipios de Santa Brígida y Guía, En Gran Canaria, en una franja de tierra que parece estar delimitado por una altitud concreta y no por citas reales. es decir, se indica dónde puede aparecer.
   Las buenas lluvias de este otoño en el norte de Gran Canaria han hecho florecer las azucenas rosadas de manera espectacular. Las imágenes que acompañan esta entrada se han obtenido en los municipios de Teror (Osorio) y Valleseco (La Laguna).
Esta planta sudafricana es considerada invasora en el Sur de EEUU, Madeira, Azores, Sur de Australia, Nueva Zelanda, y como introducida en muchas otras localidades de todo el Mundo (https://www.gbif.org/species/5325855).
   Hay que estudiar su verdadera distribución y el efecto sobre las plantas autóctonas para concretar el grado de peligrosidad de esta planta. En los archipiélagos macaronésicos de Azores y Madeira es una importante invasora. En algunas zonas de Canarias también lo puede llegar a ser.

 Estas dos imágenes corresponden a los mismos individuos. Situados en un alcornocal de la Finca de Osorio, Teror, Gran Canaria.

 Grupo de ejemplares florecidos en la Laguna de Valleseco, Valleseco.

Ejemplares bajo el mirador de la Casa del Guarda, también en Osorio, Teror.